lunes, 18 de julio de 2011

¿¿¿TE HAS ESTADO PREPARANDO EN TU FORMACIÓN???



Cuando su trabajo le viene grande y la formación le queda pequeña
A las malas perspectivas económicas se unen las pésimas sensaciones laborales: un tercio de los españoles opina que su puesto de trabajo está por encima de sus posibilidades formativas y cree que su capacitación profesional se encuentra por debajo de los requerimientos de su cargo. Y además, casi el 40% de los parados no confía en que la formación ayuda a encontrar un trabajo.
Los húngaros, daneses y eslovacos son los empleados europeos que más confían en sí mismos a la hora de desempeñar un determinado puesto, según una encuesta de Randstad. Con un 49% y un 42%, Francia y Luxemburgo son los dos países con un mayor porcentaje de habitantes que opinan que su capacitación profesional no es suficiente para desempeñar el cargo que ocupan.
En nuestro país, casi cuatro de cada diez trabajadores tienen esta misma percepción. España se coloca así a catorce puntos porcentuales por encima de la media del Viejo Continente, que es de un 22%. Por debajo de este dato se encuentran, entre otros, la locomotora económica europea, Alemania, y Grecia.
Esther Bartolomé Campos, manager de formación de Randstad, asegura que “la formación es un hecho fundamental que las empresas deben de potenciar entre sus trabajadores. No se trata de un elemento aislado, sino de un capítulo clave para elevar la productividad de la empresa. Además, motiva a los profesionales y les anima a ser más competitivos”.
España se coloca a catorce puntos porcentuales por encima de la media del Viejo Continente
En esta línea, un 44% de los titulados superiores españoles de entre 25 y 29 años ocupan un puesto de trabajo de cualificación inferior a sus estudios, frente a la media del 23% de los países que integran la OCDE, según un informe elaborado por este organismo.
A todas aquellas personas que creen que su puesto está por encima de sus capacidades profesionales, se les presentan dos opciones: fingir que sí disponen de la formación suficiente, con lo que estarían poniendo en riesgo su reputación profesional o, por otro lado, actuar con cautela reconociendo sus carencias.
Manuel Chapado, socio director de Isavia recomienda lo siguiente: “Sorpréndase a usted mismo, tome distancia y valore todo aquello de lo que ha sido capaz, que seguro que es mucho más de lo que imaginó en un principio. Lo dijo Nelson Mandela en su discurso de investidura: jugar a ser pequeños no sirve al mundo”.
Una parte importante de los españoles opina que la formación no es suficiente para encontrar empleo o para mejorar en el mercado laboral
La formación no lo es todoUna parte importante de los españoles opina que la formación no es suficiente para encontrar empleo o para mejorar en el mercado laboral. Una encuesta de Manpower revela que el 37% de los desempleados no cree que mejorar su formación aumente sus posibilidades de encontrar empleo o de lograr un ascenso. Las mujeres confían menos en la formación, llegando hasta el 43% las que creen que no puede ofrecerles más posibilidades de encontrar trabajo, mientras que, en el caso de los hombres, el porcentaje desciende hasta el 33%.
La encuesta revela también que la capacidad de delegar es la cualidad más valorada en un jefe para el 32% de los españoles. En segundo lugar, la capacidad para motivar y para dirigir son dos aspectos muy valorados por más del 20% de los empleados. Por último, poseer experiencia no parece ser importante para buena parte de los subordinados. Sólo el 6% la considera relevante a la hora de valorar a su jefe.
Asimismo, un 22% de los profesionales de nuestro país considera que la suerte es clave a la hora de lograr un puesto de trabajo, mientras que un 48% señalan a los contactos como parte imprescindible para buscar empleo, según una encuesta realizada por Randstad.
Sea como fuere, si considera que su puesto está por encima de sus posibilidades formativas, no trate de ocultar sus carencias. Recuerde que los directivos de la empresa son los que han confiado en usted para el desempeño de determinadas funciones. Será por algo, ¿no?

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